La IA también llega a la oftalmología

La inteligencia artificial, también llega a la oftalmología

La inteligencia artificial (IA) está abordando el panorama tecnológico y cada vez más está presente nuestro día a día, en las noticias y las conversaciones cotidianas.

Encontramos diversas opiniones respecto a su utilidad, pero es innegable que está presente en los avances médicos más recientes. En el artículo de hoy queremos hablar del papel que desempeña cada vez más en el campo de la oftalmología, el cual destaca por ofrecer nuevas herramientas y tecnologías para el diagnóstico, el tratamiento y la gestión de enfermedades oculares. Los beneficios de la IA se ven reflejados en una mejora de precisión, la eficiencia y los resultados en los pacientes.

Los investigadores opinan que no es probable que los modelos de lenguaje grandes reemplacen a los profesionales de la salud, pero tienen el potencial de mejorar la atención médica.

De esta forma consideran que los modelos de lenguaje grandes de última generación, como GPT-4, podrían ser útiles para brindar asesoramiento, diagnóstico y sugerencias, así como ayudar a personalizar el tratamiento para pacientes con enfermedades oculares al analizar datos clínicos y genéticos para identificar los enfoques terapéuticos más efectivos para cada individuo.

Los sistemas de IA pueden analizar imágenes de la retina, como las obtenidas a través de la tomografía de coherencia óptica (OCT) o la fotografía de retina, para detectar signos de enfermedades oculares como la retinopatía diabética, el glaucoma, la degeneración macular y otras afecciones. Estos sistemas pueden identificar patrones y anomalías que a menudo son difíciles de detectar para el ojo humano, lo que puede ayudar a mejorar la precisión y la rapidez del diagnóstico.

 

De hecho, la IA ya se está utilizando para mejorar la precisión y la seguridad de las cirugías oculares, como la cirugía de cataratas y la cirugía refractiva. Los sistemas de IA pueden ayudar a los cirujanos a planificar y realizar procedimientos quirúrgicos con mayor precisión, lo que puede mejorar los resultados para los pacientes.

Por último, en un mundo tan globalizado, los sistemas de IA pueden permitir la monitorización remota de pacientes con enfermedades oculares, lo que permite un seguimiento continuo de su salud ocular y la detección temprana de cualquier cambio o complicación.